Espacio creativo y cultural de Tiana.

Actualmente estoy en proceso de crear el primer espacio creativo y cultural que existe en España: ARTianaClub. Un concepto totalmente nuevo para vivir el arte a tope.

Un Club de Arte para grandes y pequeños, sin restricciones, de bajo coste, sin horarios fijos, con multitud de recursos, talleres, concursos, exposiciones y charlas de grandes profesionales. Un lugar cálido y sociable donde se pueda aprender a amar el arte a través de clases teóricas y una magnífica biblioteca especializada y selecta. Ah, y café, y repostería casera... Y la música más inspiradora.


Espero conseguir financiación en 2015 para poner en marcha este proyecto que creemos es indispensable en un momento de la historia en el que la tecnología nos absorve y nos aturde, y nos impide "mirar".

Este blog es la continuación de mi anterior blog: http://www.estherguillem.blogspot.com.es/

martes, 18 de agosto de 2015

Hasta el jueves, en el Café Guerbois...

¿Quiénes eran esos hombres que se reunían las noches de los jueves en el Café Guerbois, núm 11 de la Grande Rue des Batignolles (hoy el núm 9 de la Avenue de Clichy), para discutir sobre la vida y el arte...?

Manet comentaba:

"Nada pudo haber sido más estimulante que los debates regulares que acostumbrábanos a tener allí, con sus constantes divergencias de opinión. Mantenían aguzado nuestro ingenio, y nos proporcionaban una reserva de entusiasmo que nos duraba semanas y nos sostenía hasta que se concretaba en la realización de una idea. De esas discusiones emergíamos con una decisión fortalecida y con nuestros pensamientos más claros y mejor definidos".


En la Francia del SXIX los pintores sólo podían exhibir sus obras en el Salón de París, vinculado a la Academia de Bellas Artes, que contaba con un prestigioso jurado que seleccionaba las obras enviadas. En 1863 Manet mandó un cuadro:

 Desayuno sobre la hierba

Cuando el jurado lo vio, clamó al cielo por esa forma de pintar tan lejana a sus requisitos básicos, ¡fue un escándalo!, con lo que la Academia decidió abrir otro Salón paralelo para exponer las obras que habían sido rechazadas.  Fue entonces cuando los pintores del Café Guerbois, decidieron, junto a Manet, abrir una sala propia para exponer sus cuadros y surge la I Exposición de la sociedad anónima de artistas pintores, escultores y grabadores (15 de abril al 15 de mayo de 1874).

Acudieron 3500 visitantes que se burlaron de los cuadros de esos pintores jóvenes tan insólitos.

Esos eran los impresionistas, esos que a mitad del SXIX querían pintar diferente, con total libertad, sin tener que seguir las reglas estipuladas por una Academia anticuada que sólo pedía o exigía temas mitológicos, religiosos, históricos o de la Antigüedad Clásica (como Leonardo, Miguel Angel o Rafael).

Antes de los impresionistas, los pintores pintaban en sus estudios, a base de notas que tal vez habían tomado previamente en el exterior. Los impresionistas querían empezar y terminar sus cuadros al aire libre, en plein air. Los impresionistas iban veloces con sus pinceladas bruscas para captar el momento, la luz del instante. No degradaban la pintura, la empastaban. Había energía. Pero no gustó. Fueron tachados de infantiles e intrascendentes. La Academia afirmaba que esos rebeldes no pintaban como debían pero ellos perserveraron. Y lo hicieron a la vez que París evolucionaba y crecía. En esa época se inventaron los tubitos para guardar la pintura que podría llevarse al exterior, algo insólito, nuevo.

Cuando ellos llegaron, lo pusieron todo patas arriba. Aquí están algunos de esos valientes:

MONET

A él se le debe el nombre que marcaría el movimiento más importante del arte moderno con este cuadro: Impresión, sol naciente.


Crítica tras la exposición del cuadro y que dio nombre al movimiento impresionista:
¡Debí suponerlo!. Acabo de decirme a mí mismo que cuando estoy impresionado, tiene que haber una impresión.¡Y qué libertad, qué ligereza de pincel! Un tapiz en estado original está más elaborado que esta marina.
Louis Leroy

PISARRO
 
Paseo a Chaponval


RENOIR

El desayuno de los barqueros


SISLEY
Flood at Port-Marly


DEGAS

Bailarina

Y a la cabeza, el pionero, el cabecilla:

MANET

Olympia

El padre de Manet fue un juez que pretendía que siguiera sus pasos en la vida, pero un tío suyo más soñador, que le llevaba por ahí de museos cuando era niño, le animó a que se hiciera artista. Siempre digo que todos llevamos algo de arte dentro y que es la suerte de tener a las personas adecuadas a nuestro alrededor, lo que hace posible que eso pueda llegar a surgir y hacerse realidad. Esa es la suerte que, a veces se tiene, y a veces no se tiene. No obstante, lo que yo aprendo de esta lección es que los impresionistas pasaron penurias de todo tipo, fueron rechazados, humillados, y a pesar de todo eran fieles a ellos mismos y defendían aquello en lo que creían. Más allá de entrar en detalle dentro de sus vidas (eso lo dejo a la curiosidad del lector), me quedo con el mensaje que nos transmitieron y que básicamente radica en romper el molde si es preciso y no dejar jamás que nadie te diga "no".

Sé fiel a tu instinto, ese será tu arte.

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